Giliana Kudsha
Los Mandamientos no son Demasiado Difíciles
Los mandamientos del Padre no son demasiado difíciles de observar, pero para algunos del Remanente, no son capaces de cumplirlos a la perfección. El Padre es consciente de los que se esfuerzan por la perfección y de los que practican la farsa religiosa. No os encontréis entre estos últimos.
Las leyes universales se han dado como un estándar para la evaluación de la humanidad, pero los mandamientos se han dado como un estándar para la evaluación del Remanente.
Mis amados hermanos y hermanas, no lloréis porque no podéis cumplir todos los mandamientos del Padre. Mi Padre que está en los cielos conoce vuestro corazón y sabe cuáles son vuestras capacidades. Haced todo lo posible por cumplir todo lo que podáis, y Él os evaluará según Su conocimiento, y no según vuestra debilidad.
Estad en paz y sabed que el Padre ama a cada uno de vosotros. Él os conoce individualmente y el juicio se hace conforme a Su propia sabiduría.
Enseñanzas de la Luz Capítulo 13:
Valentía
1 El que no permite que el miedo aprisione sus facultades mentales demuestra una gran sabiduría ante la muerte.
2 Caminad por el mundo como un soldado de la Verdad, sed valientes como un león, pero pacíficos como una paloma.
3 Vuestros hermanos y hermanas en la Fe son todos soldados en el Ejército de la Luz.
4 Sed valientes, pero también humildes y seguid teniendo compasión por aquellos en el mundo que no tienen ninguna comprensión de la Verdad.
Didaché Capítulo 8
Ayuno y Oración (el Padre Nuestro)
1 Pero no permitan que su ayuno sea en los mismos días que los hipócritas, porque ellos ayunan el Lunes y el Jueves.
2 En cambio, es nuestra tradición ayunar el Miércoles y el Viernes (la víspera del Shabat).*
*Y en la medida de lo posible, el Miércoles deberán ayunar de lo que contiene productos lácteos y el Viernes deberán ayunar de lo que contiene carne. Nuestro ayuno es desde la salida hasta la puesta del sol.
3 No oren como hacen los hipócritas, sino que deben orar como lo mandó el Rabino Yeshúa en Su Evangelio, de esta manera:
4 Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea Tu Nombre.
5 Que venga a nosotros Tu Reino.
6 Hágase Tu Voluntad así en la tierra como en el cielo.
7 Danos hoy nuestro pan de cada día.
8 Perdona nuestras ofensas, así como nosotros hemos perdonado a los que nos ofenden.
9 Y no permitas que caigamos en la tentación, sino líbranos del malvado.
10 Porque Tuyo es el Reino, el Poder y la Gloria por los siglos de los siglos. Amén.
11 Deberán rezar esto tres veces al día como enseñó Nuestro Señor Yeshúa.