(Sobre China)
1 La Palabra de Yeshúa dada a Sus siervos el Sacerdote Serafín y el Hermano Aarón en Terra Nova, y a los fieles en Uzbekistán.
2 Yeshúa ha dicho:
3 Dad estas palabras a todos los que tienen oídos para oír y ojos para ver, para que no caigan en el abismo oscuro que aguarda a los injustos.
4 China, has sido advertida muchas veces en tu historia, y en estos días has vuelto a ser advertida.
5 Yo sé de tus obras y de todos los actos injustos que has cometido contra los inocentes y contra Mis ovejas.
6 Tus atroces crímenes contra el mundo no han pasado desapercibidos.
7 Se ha registrado el número de muertes de Mis ovejas y de otros inocentes.
8 Tus obras se darán a conocer a toda la humanidad en todo el mundo, y serás avergonzada.
9 La codicia que has mostrado es repugnante para Mí y es odiada por Mi Padre.
10 Tus casas y edificios se derrumbarán como nunca antes en los próximos terremotos.
11 La gente del mundo te mirará y se lamentará, diciendo: “Oh China, ¿cómo ha llegado a ser esto? ¿De dónde vendrá nuestro oro ahora que has caído?”
12 Muchos de vosotros y de los que apoyan a vuestro gobierno corrupto caerán con vosotros y se ahogarán en las profundidades del mar.
13 No toquéis a Mis amadas ovejas, ni a sus casas ni a sus lugares de culto.
14 ¡Pero mirad! Hay esperanza para vosotros y vuestros líderes.
15 Arrepentíos antes de que sea demasiado tarde.
16 ¡Arrepentíos ahora!